Juegos "viejos"

Recreos: (primer ciclo)
El patio de la escuela es de cemento y en los recreos hay que compartirlo con otros grados. Al fútbol no pueden jugar por falta de un lugar ideal para ese deporte (aunque casi siempre lo intentan, dando lugar a choques con otros compañeros).
En el aula leímos poesías que hacían referencia al juego de las esquinitas. Me preguntaron cómo se jugaba y lo hicieron durante varios días. (Aprovechando un rectángulo del patio 4 alumnos se colocan en los vértices y uno en el medio. Los de las esquinas deben intercambiarse de lugar y el del medio, tratar de ocupar uno dejando a otro compañero en el centro).
En otra oportunidad no sabían a que jugar. Me acordé que, de niña, nos divertía el CIGARRILLO 43 (Todos los participantes se colocan contra una pared menos uno, que dice de espaldas a sus compañeros “Uno, dos, tres, cigarrillo 43. Mientras él dice esa frase los otros chicos avanzan hacia su dirección, ya que el primero que lo haga ocupará el lugar de mando. Cuando el recitador se da vuelta, todos quedan “petrificados” en sus lugares. Si alguien se mueve mientras el recitador está mirando, debe volver a la línea de partida). No se imaginan como se divirtieron y lo siguen haciendo. Tantos juegos de computadoras no dan lugar a los juegos al aire libre, en grupo y respetando las reglas.
Pensé que no se iban a entusiasmar con diversiones tan viejas, pero lo hicieron, ya que no las conocían.
También es lindo el trabajo que hace el nuevo bibliotecario de la escuela: les cuenta cuentos a los niños en el primer recreo. Siempre llega al punto culminante cuando termina ese recreo, lo que hace que los chicos, en el segundo recreo, corran a la biblioteca a escuchar el final.